Dermatitis Atópica
Dermatitis Atópica (Eccema)
La dermatitis atópica, también conocida como eccema, es una inflamación crónica y recurrente de la piel que se caracteriza por resequedad, picazón y erupciones. Afecta principalmente a niños menores de 1 año (80% de los casos), pero puede manifestarse a cualquier edad. El manejo adecuado de la dermatitis atópica depende en gran medida de la educación tanto del paciente como de su familia, siendo fundamental el cuidado adecuado de la piel para su restauración.
Causas de la Dermatitis Atópica
La dermatitis atópica tiene una causa multifactorial, lo que significa que diversos factores contribuyen a su desarrollo. Estos incluyen:
- Factores genéticos.
- Factores ambientales.
- Daño en la barrera de la piel.
- Factores emocionales.
- Alergias (solo deben restringirse alimentos en caso de alergias comprobadas).
Un enfoque multidisciplinario es clave para el manejo de esta condición, y en algunos casos, es necesario incluir apoyo psicológico.
Síntomas de la Dermatitis Atópica
Los síntomas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y varían según la persona, la edad y la gravedad de la condición. Entre los síntomas comunes se incluyen:
- Piel seca y agrietada.
- Picazón intensa (piquiña).
- Brotes micropapulares (salpullido confluyente).
- Exudado (secreción de líquido amarillento) y formación de costras.
- Engrosamiento de la piel.
- Oscurecimiento de la piel alrededor de los ojos.
- Laceraciones provocadas por el rascado.
Cuidados de la Piel en Pacientes con Dermatitis Atópica
- Ropa
Utiliza prendas 100% algodón o tejidos naturales como el lino. Evita fibras
sintéticas y lana. La ropa debe ser holgada para evitar fricción, y procura no abrigar en exceso al niño.
- Lavado de la Ropa
Lavar la ropa con jabón líquido suave y enjuagar bien para eliminar cualquier residuo de detergente. No uses blanqueadores ni suavizantes.
- Temperatura Ambiente
Evita cambios bruscos de temperatura y temperaturas extremas, tanto frío como calor. Mantén una temperatura ambiente ideal entre 20-22°C.
- Baños
Los baños deben ser cortos y con agua tibia. Usa jabón suave especial para pieles atópicas (preferiblemente productos Syndet sin detergente). También puedes añadir aceite al agua del baño para hidratar la piel. Evita usar esponjas, es preferible limpiar directamente con la mano.
- Secado Después del Baño
Seca la piel sin frotar, solo con toques suaves. Con la piel aún ligeramente húmeda, aplica una crema hidratante (emoliente).
- Hidratación
Es crucial mantener la piel hidratada aplicando crema hidratante varias veces al día, especialmente si la piel se siente seca.
- Cambio de Pañal
Para limpiar el área del pañal, usa preferentemente solo agua para evitar irritaciones.
- Cuidado de las Uñas
Mantén las uñas siempre cortas y limpias para evitar que el rascado cause heridas e infecciones.
Conclusión
El manejo de la dermatitis atópica requiere de un enfoque integral que incluya el cuidado de la piel, el control ambiental y la hidratación constante. La educación tanto del paciente como de la familia es fundamental para prevenir brotes y mejorar la calidad de vida.